Posible corrupción en la educación de Nariño. Riesgo de descertificación.

El gobernador actual de Nariño, quien fue elegido en gran parte por su contundente discurso anticorrupción y su promesa de mejorar la calidad educativa en el departamento, enfrenta una situación lamentable a raíz de un supuesto manejo inadecuado de la planta de personal,  supuesto favorecimiento a ciertos sindicatos y supuesta falta de planeación  en la gestión de la educación, lo cual pone en riesgo el manejo de este sector en la región.

Según documentos entregados a Página 10 por una fuente institucional, señalan que una trabajadora fue nombrada en una Institución Educativa, pero terminó trabajando en un sindicato, cobrando su salario desde allí, sin cumplir con las labores en la Institución Educativa, para la que había sido nombrada. Uno de los documentos clave en esta denuncia es la Resolución Nro. 3320 del 3 de julio de 2024, que  detalla el nombramiento provisional de una trabajadora en una vacante temporal. Sin embargo, la controversia radica en que la persona nombrada terminó trabajando para un sindicato, sin que medie acto administrativo, lo que ha despertado sospechas sobre el manejo de los recursos y los procedimientos administrativos en la Secretaría de Educación. Por su parte, desde la Institución Educativa se ha reclamado la presencia de la funcionaria, pero ésta decidió supuestamente quedarse en Pasto, tal como lo certifica el presidente del sindicato.

Además, han surgido otros cuestionamientos sobre posibles nombramientos fuera de la planta autorizada por el Ministerio de Educación, lo que ha generado incertidumbre entre los docentes y la comunidad educativa, tal como se señala en el acta del 5 y 6 de agosto de 2024 firmada por el ministerio de Educación, Gobernación y sindicatos. Este escenario es aún más preocupante si se tiene en cuenta que algunos docentes que ganaron concursos de méritos aún no han sido nombrados, debido a la ocupación de estas plazas irregulares. Mientras tanto, quienes están en esos cargos continúan recibiendo salarios sin ejercer sus labores. Ante esto, el Ministerio de Educación habría cerrado el sistema maestro para evitar más nombramientos. Este bloqueo pone sobre la mesa la posibilidad de que el departamento pierda la certificación para manejar la educación pública, lo que implicaría graves consecuencias para la administración regional.

La opinión pública exige respuestas claras y contundentes. Las autoridades competentes deben intervenir para investigar a fondo estas denuncias, garantizar la transparencia en la gestión de los recursos públicos y asegurar que la educación en Nariño no se vea más afectada por intereses particulares que traicionan el compromiso con la mejora del sistema educativo del departamento.

Fuente:Pagina 10